Fidelidad: De la Teoría a la Práctica

Esta mañana terminé una conversación que me ha aproximado alarmantemente al cinismo, como filosofía de vida.

La Fidelidad. ¿Es ésta solo una absurda ilusión que creamos en base a nuestra propia estructura ideal de lo que debe ser una relación?

O, por el contrario, ¿Debería ser parte integral de los compromisos que establece una Relación?

El problema pienso, como alguien me lo hizo ver ayer, es que siempre lo queremos todo.

Según mis cálculos, los cuales son muy poco optimistas, se establece que la duración promedio de una relación afectiva es de 5 meses. Y la infidelidad se posiciona en los primeros lugares de causa de ruptura.

Ahora bien, la mayor parte de las parejas prometen fidelidad eterna cuando se encuentran total y perdidamente cegados a la realidad, por culpa del amor. Luego de ese período de abundante concupiscencia (que generalmente dura unos dos o tres meses, dependiendo de la frecuencia de los encuentros sexuales) llega el período en el cual las promesas hechas, comienzan a perder valor ante el constante e incesante bombardeo sobre la frágil y vulnerable sexualidad masculina. Y aquí es donde empiezan las tensiones sexuales, que degeneran en peleas y discusiones que terminan por deteriorar la relación.

Un caso famoso era una pareja de conocidos, quienes se peleaban invariablemente cada fin de semana, de forma que cada cual satisfacía eficientemente su deseo de estar con otras personas y luego el lunes se reconciliaban nuevamente.

Hoy sin ir más lejos, me encuentro con un tipo en el chat, (al parecer muy fanático de las Spice Girls ya que su Nick era “Friendship never Ends”, muy homosexual el nick) me dice que él tiene su novio, pero éste anda de viaje (si, claro) y que si le gustaría un faje.

Hasta el momento, no conozco una sola pareja (entendiéndose como relación afectiva donde los individuos cohabitan) que sea 100% fiel.

Como dijo Juan Gabriel ¿Pero qué necesidad?

En mi caso particular, la relación más satisfactoria que he tenido hasta el momento ha sido una relación abierta. Mi opinión personal es que, desde el momento en que sabes que no debes esperar fidelidad, uno se economiza energía física y psíquica, la cual puede invertirse en hacer más relajada y amena la relación.

Me dijo alguien que va a ser difícil que encuentre alguien que piense así, lo que me hace pensar que en realidad preferimos vivir en una complicada ilusión, en lugar de vivir tranquilos con los ojos puestos en la realidad.

De un libro que leí hace poco, una frase muy ad-hoc: “Neurótico es aquel individuo que pasa la mitad de la vida poniéndose trampas y la otra mitad cayendo en ellas”. Gracias Gloria, una vez más.