lunes, 11 de octubre de 2004

Experiencias,Expectativas y Oportunidades

Continuando con nuestra discusión del viernes anterior, hemos de reconocer que en realidad, a muchos de nosotros no nos gustan las cosas sencillas en materia de relaciones. Casualmente, ayer ví en repetición un Capítulo de "Sex and the City" (Dios bendiga al Cosmo Channel, y a sus ejecutivos se los pague con hijos) en los que Carrie Bradshaw , se cuestionaba si es que en realidad no nos gustan las relaciones Drama-Free.

En nuestra búsqueda de la relación "Perfecta" ¿En verdad le damos una oportunidad a alguien?

Yo mismo en este momento, me estoy dando el chance de "conocer" a algunos prospectos candidatos a posible relación sexo-afectiva, lo que me condujo a esta serie de cuestionamientos.

Mi respuesta personal, ante tal interrogante , es que quizá espero demasiado de mis Candidatos.

En un caso más amplio...Como en la política,todos esperamos demasiado de nuestros candidatos.

En la mayor parte de las situaciones, puede ser que experiencias previas hayan moldeado nuestras expectativas al respecto de lo que debe o no debe ser una relación. Sin embargo , la gente no tiene la culpa de nuestros éxitos o fracasos pasados. Muchas veces, ésto llega a dañar seriamente nuestra habilidad de relacionarnos con los demás homosexuales de nuestra comunidad, con la consiguiente reducción de posibilidades de establecer una relación de pareja.

Estaba viendo un programa en Discovery Channel (Loca científica , yo) en el que se decía que cuando uno ve una cosa, en realidad hace referencia a "... la imagen mental que uno tiene de la cosa en sí, no de la cosa que uno está viendo en realidad."

Esto no es nada nuevo. Ya Platón (quien por cierto, era bastante homosexual) había hablado de ello en "La República". Pero, lejos de toda absurda y estéril elucubración filosófica, quizá sea cierto, y con el tiempo, no vemos más a la persona que se acerca, sino al conjunto de personas que, para bien o para mal, han moldeado nuestra Historia. El hecho de que alguien haya jugado conmigo, no quiere decir que todo el mundo que se me acerque, quiera o vaya a jugar conmigo.

Lo importante es que no perdamos la capacidad de ver a cada persona como un ser diferenciado de nuestro pasado y por lo tanto, excento de cualquier responsabilidad y merecedor de nuestra confianza(al menos, hasta que demuestre lo contrario).

Con lo anterior, no intento alentar a nadie a que se tire de cabeza con el primer hijo de vecino que se le atraviese en el camino (ya sé que por lo general, los homosexuales tendemos siempre a los excesos, por eso aclaro). No, no hay que ser TAN ingenuos. Hay relaciones que, de entrada, uno sabe que no van a funcionar(been there, done that) y sería bastante "estúuuupido y displiscente" de nuestra parte, tropezar de nuevo con la misma piedra. Pero tampoco se trata de ser cerrados.

El ambiente puede ser excesivamente patólogico a veces y pienso que por nuestro bienestar emocional, podriamos comenzar a adecentarlo un poco, comenzando por nosotros mismos. Se puede jugar limpio. A pesar de nuestras experiencias previas y nuestras expectativas futuras, hay que dejar espacio para la oportunidad.

No hay comentarios.: