Lord Rougette...Rise

Desde la Sede Tegusina...Septiembre 18,2005

Fin de semana agetreado en mi ciudad nativa. Luego de tener la cita de rigor con mis amigas, amigos y entes, en los que recibí una descarga monumental de información, chismes, apodos (como el de "Xopita Oralia"), tuve además el privilegio de tener audiencia con mi sabia Maestra, gurú y Chamana personal, el Negro Mandingo, quien regresó triunfante de tierras Europeas en su tránsito hacia nuevos lares donde expandir su imperio: Sydney.

Si bien mi iniciación en el ambiente corrió a cargo de la Venerable Zorra de Jade, la culminación de mis estudios fue en la Academia de Altas Homosexualidades de la Rosa, donde perfeccioné mi estilo, clase, buen gusto, aparte de convertirme en un seductor digno de cuidado y Bar Tender de disco gay Profesional (No como los que tiene el gay bar de Tegus, que aun preguntan al viandante con qué desean tomar su Vodka Tonic).

Tengo que agradecerle a mi amigo el Negro, el haberme enseñado a imponer respeto entre mis contemporáneos y algunos de la vieja guardia lo suficientemente impertinentes como para no entender por las buenas el significado de la palabra "No", lecciones muy útiles, tengo que admitir, en un ambiente donde por envidia, celos o despecho, la gente es capaz de los más desagradables escándalos.

Sabio como pocos, también me enseñó a establecer criterios de vida importantes y asentar las bases para conceptos mucho más avant garde que la gente de mi generación, así como a ser directo y consecuente en mis planteamientos y políticas de vida y siempre tratar de ir a un paso adelante que el resto.

A decir verdad y en honor a una humildad que nunca me ha caracterizado, (pero que sin embargo le debo a mi Maestro), no estoy seguro de haber aprendido todo lo que él me quizo transmitir, de lo que si estoy seguro es que lo que lo que aprendí, lo he aplicado bien, lo que creo que resulta más gratificador, a fin de cuentas.

Buena Cazería, por las tierras del Kanguro y del Koala, Master Noire. Desearte suerte está de más. Esa te la creaste vos mismo.