Amor cultural
Hay un libro de un miembro de la Real Academia de la Lengua que siempre he disfrutado mucho y que aun conservo a pesar que una gotera en mi casa anterior casi lo destruye por completo. El libro en cuestión es "Historia de la Gente", de Antonio de Mingote.
Es un libro que narra historias de personas a lo largo de las diferentes épocas y va analizando capítulo por capítulo la evolución e involución de la sociedad humana.
Una de las facetas más interesantes que se puede entreleer es la compleja evolución de las relaciones afectivas, quiero decir, como la gente ha entendido o ha concebido el amor a lo largo de las eras. No me podré a enumerar cada una de las categorías...llevaría la historia, en lo que si quiero hacer hincapié es que concebimos el amor desde una manera cultural.
Y la verdad es que aprendemos lo que creemos que es (o debería ser) una relación desde la CULTURA. Así, Sr. de Mingote, tenemos la última categoría del amor: El Amor Cultural. El que nos enseñan Thalía o RBD en las telebobelas mexicanas, o en las canciones de la diva pop del momento.
Ya el escenario se plantea lo suficientemente tétrico, pero aún empeora más, por que a la enorme cantidad de expectativas melodramáticas impuestas por los rituales románticos y demás scripts de nuestra cultura, debemos añadir el obstáculo adicional de tener que definir el amor en términos homosexuales.
De aquí derivan muchas de las falacias, malos entendidos que conducen a las relaciones gays, a una prematura fecha de caducidad. Tenemos nuestros paradigmas también en estas áreas. ¿Son nuestras expectativas reales en relación al amor, o pretendemos comprar un novio en Benneton o en el GAP?
"Maybe is true you can buy love, but maybe you can rent it"
No hay comentarios.:
Publicar un comentario