martes, 6 de junio de 2006

Jump

Are you ready to Jump
get ready to jump
Don't never look back

Oh Baby!


Yes I'm ready to jump
Just take my hand

get ready to jump




El sábado me encontré de casualidad con una pelicula de temática gay, la cual, para mi mala suerte ya caché empezada, me da lata, ya que no la puedo citar, pero en fin.

En uno de los parlamentos de la película se propuso la siguiente pregunta:

¿Qué pasa cuando no nos decimos la verdad?

“Interesante”, me dije. De repente recordé cuan fácil podemos salirnos de base en este aspecto, y sin temor a equivocarme tengo que sostener que a la inmensa mayoría de nosotros nos encanta vivir fuera de la realidad.

Alarmante, ya que muchas veces esta es la razón de muchos de nuestros desaciertos en la vida, si pensamos que vamos en una dirección, pero en realidad vamos en otra.

No quiero mamar gallo con el problema Platónico de la verdad ni nada por el estilo. Al contrario, lejos del Demiurgo y cualquier otra entidad hiperuránica, comenzaré por hacer un llamado de atención personal en este caso, sobre los planteamientos de mi Realidad Personal, para analizar la consistencia entre mis intenciones y mis acciones, cosa que siempre me ha preocupado de gran manera.

Ese es el primer nivel, ¿pero qué pasa cuando no nos decimos la verdad entre nosotros?

Es un hecho que no se puede esperar aceptación y evolución en la ZOOCIEDAD , mientras nosotros mismos no tengamos las ideas, acciones y planteamientos claros.

Pero lo más importante, como siempre es nuestra calidad de vida Instantánea, muchas veces nos quejamos de que nos sucedan cosas que nosotros mismos propiciamos por haber extraviado el rumbo o perdido la perspectiva en determinado momento.

Este es un llamado a la acción. The more that you wait, the more time you waste.

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